Democracia y autoritarismo en América Latina / Tomás Paéz, compilador; Carlos Alberto Montaner... [et al.]

Unas palabras preliminares / Alejandro Oropeza G. -- Presentación / Tomás Páez -- El Che Guevara y las cosas que hacen los progres / Carlos Alberto Montaner -- Propiedad, capacidad emprendedora, libertad y democracia / Tomás Páez -- Institucionalidad y democracia / Alejandro Arratia -- El populismo revolucionario y las nuevas formas de dictadura en América Latina / Trino Márquez -- Procesos de democracia y legitimación política en América Latina / Gustavo Portillo -- Terrorismo étnico y multiculturalismo vs. sociedad abierta / Carlos Raúl Hernández -- Los procesos de consolidación y regresión democrática como problema / Alejandro Oropeza G.

Los modelos dictatoriales, autoritarios y totalitarios fundamentan el control social por la imposición del pensamiento único; es decir, una forma “verdadera” de concebir el mundo, que puede fundarse en el mito de la raza superior o de una clase social o en la noción abstracta de “pueblo”, a la que vacían de todo contenido. De las andanzas autoritarias tiene Latinoamérica y el Caribe una larga y dolorosa historia; se intentó imponer el socialismo por la fuerza en la segunda mitad del siglo pasado y sus resultados fueron destrucción, muerte y más pobreza. Fracasada la vía armada, pretenden sin renunciara la violencia pasar de contrabando las viejas teorías absolutistas con un falso discurso de la democracia, la igualdad y la libertad. La confrontación entre sociedad cerrada y sociedad abierta, entre colectivismo e individualismo, entre socialismo y democracia, entre estatismo y mercado, entre privatización absoluta (el colmo al que arriba el socialismo) y libertad y autonomía, no es nueva. El debate debería tomar en cuenta la experiencia reciente de la apertura económica en el subcontinente. Los países latinoamericanos que habían hecho bien y a tiempo las tareas tendentes a la modernización de la economía y la institucionalidad, superaron con éxito en la primera década de este siglo la crisis mundial que todavía incide en la economía y la política de los Estados Unidos y mantiene estancada a la Unión Europea. Los contenidos del libro fundamentan la necesidad de construir y defender, todos los días, la sociedad abierta y plural, los derechos humanos y las libertades, y confrontar las ideas “progres” que propugnan la planificación centralizada, desconocen al ser humano y aniquilan la pluralidad.